Para lograr un entorno positivo. Relaciones con los demás y en contacto con la comunidad

 

 

a) Facilitar la participación y colaboración de la familia

 

 

 

Algunas pautas

 

 

Participar en la atención y en la vida cotidiana

 


  • Mantener una actitud de respeto, escucha y facilitar su presencia y colaboración.

 

  • Siempre que la persona mayor lo acepte, posibilitar que las familias participen en la vida cotidiana del centro, en los cuidados (dar comida, aseo, etc), así como en el diseño y desarrollo del plan de atención y vida.

 

  • Tener un profesional de referencia que mantenga con las familias una comunicación fluida.

 

  • Evitar que las familias ocupen el espacio de decisión de la propia persona.

 

 

Cuando la atención es en centros:

 

 

  • Apoyar a las familias cuando la persona ingresa en un centro. Es un momento muy difícil en el que afloran sentimientos de culpa, de inseguridad o incluso tensiones entre hermanos ante la decisión tomada.

 

  • Invitarles a participar en las actividades cotidianas del centro y también en las actividades de ocio que se organicen.

 

  • Contar con cauces donde participar (una asociación de familias o similar).

 

  • Tener la posibilidad de recibir visitas a lo largo de todo el día (respetando la privacidad de ciertas actividades y la decisión de quienes no deseen algunas visitas).
  • Facilitar que los familiares puedan compartir comidas o incluso pasar la noche acompañando a la persona.

 

  • Tener lugares para recibir visitas en privado
 

 

 

Mediar desde la prudencia en las relaciones más complicadas

 

 

  • Estimular el contacto, la cercanía entre la persona mayor y su familia siempre que esto no sea contraproducente o haga daño a la persona.

 

  • Evitar que se sientan recriminadas (a veces no es lo que decimos sino cómo lo decimos…lo que puede incrementar sus sentimientos de culpabilidad o su percepción de frialdad o rechazo por nuestra parte).

 

  • No alimentar los reproches de las personas mayores hacia sus familias. Escuchar, orientar con un enfoque práctico y positivo.

 

  • Buscar actividades conjuntas entre la persona mayor y la familia que faciliten encuentros agradables dentro y fuera del centro. Darles apoyos para ello.

 

  • Mediar en las dificultades en la relación entre la persona mayor y su familia, ajustando expectativas y procurando que se comprendan.

 

  • Estimular la presencia y colaboración familiar, respetando su ritmo, su decisión y su grado de implicación.

 

  • Cuando haya que dar cierta información que pueda incomodar a las familias, buscar el momento y lugar más adecuado, el profesional que mejor pueda transmitirla y cuidar el modo de decir las cosas.

 

 

b) Promover relaciones más allá de la familia

 

 

 

Algunas pautas

 

 

Facilitar que las personas mantengan sus amistades y contactos

 

 

  • Conocer la red social de cada persona y su valoración en cuanto a su percepción de cercanía y satisfacción.

 

  • Animarles a mantener contacto con los amigos y conocidos utilizando medios diversos (teléfono, carta, Internet…).

 

  • Aprovechar oportunidades cotidianas para retomen algunos contactos.

 

  • Dar apoyos para que puedan visitar a sus amigos, acudan a lugares que solían frecuentar (centro social, cafeterías, parques…).

 

  • Si viven en un centro, facilitar que amigos y conocidos acudan y conozcan donde y como viven las personas. Acogerlos, hacer todo lo posible de que se sientan cómodos, como en casa.

 

  • Estar atentos a los signos de afinidad entre personas cuando están en un centro y buscar ocasiones para que estén juntas. De ahí puede surgir una nueva relación afectiva.

 

  • Respetar los ritmos y negativas de las personas. Hay momentos para los demás…, y en ocasiones, se prefiere estar solo.

 

 

Contar e integrar a los/as voluntarios/as

 

 

  • Promover colaboraciones por parte de voluntarios que cuenten con una adecuada planificación.

 

  • Integrar a los voluntarios/as en los programas y actividades del centro. Evitar que se perciban y funcionen como un recurso “aislado” de los programas y funcionamiento del centro.

 

  • Diseñar acompañamientos personalizados acordes al plan de atención y vida de cada persona usuaria. Promover una estrecha colaboración entre cada voluntario y el profesional de referencia.

 

  • Informar a los profesionales del centro sobre de los cometidos del voluntariado.

 

  • Realizar encuentros conjuntos entre profesionales de atención directa y voluntariados para consensuar estrategias de cooperación.

 

  • Formarles y acompañarles en el desempeño de su labor

 

 

 

c) Vivir y ser parte de la comunidad

 

 

 

Algunas pautas

 

 

  • Informar a las personas sobre los recursos y servicios de la comunidad que tengan más cerca (salud, comercios, iglesias, centros sociales, de cultura, deporte…).

 

  • Dara apoyos para que las personas utilicen y frecuenten lugares y servicios del barrio, y puedan relacionarse con los vecinos.

 

  • Organizar proyectos de voluntariado que ofrezcan apoyo para salir del centro.

 

  • Organizar encuentros y proponer actividades con personas y grupo ajenos al centro (jóvenes, niños, asociaciones, grupos con dificultades de inclusión social (inmigrantes, reclusos, personas con discapacidad, etc).

 

  • Facilitar la presencia de personas del entorno cercano

 

  • Abrir los servicios del centro a la comunidad

 

Se permite reproducir y utilizar estos contenidos siempre que se realice la correspondiente citación de la autoría (Teresa Martínez, 2013. En: www.acpgerontologia.com).

 

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